cuidado del párpado

El párpado también interviene en la salud ocular

Cuidado del párpado

Los párpados son los pliegues cutáneos móviles que cubren la parte anterior del ojo y cuya función principal es la de protección del glóbulo ocular.

En el borde de los párpados nacen las pestañas y es la zona donde se encuentran las Glándulas de Meibomio.

Un buen cuidado del párpado es importante para prevenir las enfermedades asociadas a esta parte de la zona periocular. Para poder prevenir la aparición de estas, algunos de los consejos a seguir son:

  • Desmaquillado diario de la zona palpebral con productos específicos como toallitas de limpieza de la zona ocular.
  • Uso de geles y/o cremas hidratantes, descongestivas y antioxidantes.
  • Uso de gafas de sol con protección UV para evitar la oxidación de la piel del párpado y la aparición de arrugas.
  • Evitar el frote de la zona palpebral con las manos en caso de escozor para no irritar la piel y realizar microheridas. Uso de cremas específicas en estos casos.
  • Maquillaje con productos hipoelérgicos y específicos.

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Principales funciones de los párpados

A) Mantener la película lagrimal

La función de la película lagrimal es proteger al ojo de influencias externas y mantener la salud de la córnea y la conjuntiva.

  1. Función óptica debido a que mantiene una superficie corneal ópticamente uniforme.
  2. Función mecánica con el lavado de restos celulares, sustancias extrañas, de la córnea y del saco conjuntival, y lubricación de la superficie.
  3. Nutrición para la córnea
  4. Función antibacteriana

La película lagrimal está formada por 3 capas de distinta composición. La capa interior o mucínica, la capa intermedia o acuosa y la capa externa o lipídica. La capa lipídica se forma gracias a las secreciones de las glándulas de Meibomio, situadas en los párpados. Estas glándulas son unas glándulas sebáceas que secretan los lípidos que formaran parte de la capa externa de la lágrima.

B) Protección

Los párpados se cierran para proteger al ojo, de hecho es un reflejo cuando algo se acerca al globo ocular. Por eso, cuando hay una lesión en la superficie del ojo uno de los síntomas más constantes es la tendencia a tener el ojo cerrado. Es curioso lo bien coordinado que están los párpados para estar abiertos lo justo para que veamos, y el resto del globo ocular que está por encima o por debajo de la córnea quedan tapados. Cuando miramos hacia abajo, el párpado superior sigue el movimiento del ojo, para que no quede al descubierto la parte superior. Y el párpado inferior hace lo mismo (en menor medida) cuando miramos hacia arriba.