El tabaco y otros factores de riesgo de la DMAE
La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) es una enfermedad ocular degenerativa de la mácula, la parte central de la retina encargada de la visión de los detalles. Como su nombre indica, la DMAE está estrechamente relacionada con la edad, y es en la actualidad la primera causa de ceguera en mayores de 50 años.
Aunque su causa aún no es clara, es conocido que el tabaco es uno de los principales factores de riesgo evitable para el desarrollo o progresión de la patología.
Os explicamos cómo afecta el tabaco a la mácula, y qué otros factores pueden contribuir a la aparición de la DMAE, y cómo podemos actuar.
¿Por qué el tabaco influye en la aparición y empeoramiento de la DMAE?
El tabaco multiplica por cinco las probabilidades de padecer DMAE. Está comprobado que en las personas fumadoras, la DMAE aparece de forma más precoz (a edades más tempranas).
El tabaco altera la circulación de los vasos sanguíneos de los ojos y dificulta la correcta distribución de oxígeno a la mácula.
Asimismo, el tabaco aumenta la oxidación del tejido debido a sus múltiples toxinas.
Uno de los cambios que tienen lugar en la mácula de los pacientes con DMAE es la aparición de drusas, que son depósitos de coloración amarillenta (compuestos por proteínas y lípidos) que el ojo no puede eliminar debido al deterioro de los vasos sanguíneos.
¿Qué otros factores de riesgo pueden contribuir a la aparición de la DMAE?
La DMAE es más común en mujeres que en hombres, en personas con antecedentes familiares de DMAE y personas de etnia caucásica.
Aunque la edad, el tabaquismo y el factor genético son los principales factores de riesgo reconocidos actualmente, se está investigando la asociación de la DMAE con la hipertensión, la obesidad o la diabetes, entre otros factores.
Otro factor que puede contribuir a la aparición de la DMAE u otras patologías de la retina es el déficit de algunos nutrientes, como vitaminas antioxidantes (por ejemplo la vitamina D y las vitaminas del grupo B), carotenoides (como la luteína y la zeaxantina), y minerales como el Zinc.
¿Qué podemos hacer para mantener la salud ocular?
Os damos algunos consejos para mantener la salud ocular:
- Seguir una dieta saludable, rica en verduras, frutas, cereales integrales y fuentes de proteína saludables (huevo, legumbres, frutos secos, pescado azul). Evitar el azúcar y las harinas refinadas.
- Mantenerse activo física y mentalmente
- Eliminar el tabaco de su vida
- Proteger los ojos de la radiación solar
- Tener en cuenta los antecedentes familiares de enfermedad ocular
- Realizar revisiones periódicas con el oftalmólogo (sobre todo a partir de los 40 años)
- Cumplir con el tratamiento y las recomendaciones indicadas por su médico