Glaucoma: Factores de riesgo e importancia de los controles oftalmológicos
El glaucoma es una patología neurodegenerativa del ojo en la que se produce daño en el nervio óptico secundario a la presión intraocular (PIO), ya sea alta o normal, que puede llevar a un deterioro progresivo e irreversible de la función visual (campo visual).
El nervio óptico es un tejido ocular indispensable que tiene la función de enviar la información visual captada por la retina hacia el cerebro, el cual interpreta como imagen.
La consecuencia de estos daños se traduce en una pérdida progresiva y crónica del campo visual (visión periférica) hasta llegar a producir una ceguera total en la fase más avanzada de la patología. Se trata de la primera causa de ceguera no irreversible del mundo y más de 80 millones de personas lo padecen.
Con motivo del Día Mundial del Glaucoma, que se conmemora el 12 de marzo para divulgar y concienciar sobre esta patología, os explicamos la importancia de los controles oftalmológicos en estos casos.
¿Por qué es importante el diagnóstico precoz y los controles oftalmológicos en los casos de glaucoma?
Aunque el glaucoma causa una pérdida de visión periférica, que a medida que avanza la enfermedad avanza hacia la visión central, en sus primeras etapas no presenta síntomas y pasa inadvertida.
Debido a que muchas personas desconocen que padecen la enfermedad (hasta el 50% de las personas que la padecen), ésta progresa hasta que cuando aparecen los síntomas ya es tarde, y la pérdida de visión es considerable.
¿En qué casos son fundamentales los controles oftalmológicos del glaucoma?
Como hemos visto, la detección precoz del glaucoma es fundamental.
Para ello, es importante tener en cuenta algunos factores de riesgo que pueden predisponer al desarrollo de glaucoma:
Antecedentes familiares
Se conoce que existe entre un 4% y un 16% más de riesgo de padecer glaucoma primario de ángulo abierto si algún integrante de la familia inmediata (padres o hermanos) lo sufre.
Edad
Aunque el glaucoma puede aparecer en cualquier momento de la vida, es más frecuente que aparezca en personas mayores de 40 años. Este riesgo aumenta a medida que se envejece debido a la degeneración de los tejidos oculares.
Presión ocular alta o Hipertensión ocular
La presión intraocular es uno de los factores de riesgo principal de la aparición del glaucoma, ya que el nervio óptico es sensible a la misma.
Miopía Alta
La Miopía Alta es otro factor de riesgo para el desarrollo de glaucoma.
Este error de refracción predispone a la persona a mayor riesgo de desarrollar alteraciones oculares, como problemas para drenar el humor acuoso.
Una vez conocemos los distintos factores de riesgo asociados al desarrollo de glaucoma, es importante que las personas con mayor riesgo de padecer glaucoma acudan al oftalmólogo para detectar o descartar el diagnóstico de este de forma precoz. Es importante seguir las recomendaciones acerca de las revisiones oftalmológicas necesarias y los tratamientos oculares en caso de que estos sean pautados por el experto.